Bandar Seri Begawan, Mezquita del Sultán Omar Ali Saifuddin, Brunei

Sultanato de Brunéi

SULTANATO DE BRUNÉI

Mezquita Jame Asr Hassanil Bolkiah, Bandar Seri Begawan, Brunei
Cúpulas de la Mezquita Jame Asr Hassanil Bolkiah

Introducción

Este pequeño país situado en la isla de Borneo, tiene una de las economías mejor saneadas de la zona, gracias a sus yacimientos petrolíferos.

El Sultán de Brunéi manda más que los que mandan, es más, podría decirse que el país es suyo. De hecho, sus prístinas selvas no expoliadas gracias a su buena salud económica, le pertenecen.

Aquí la venta de alcohol está prohibida, así como muchas otras cosas. La ley que impera es la sharia, y evidentemente, el islam es la religión mayoritaria. En la capital hay preciosas mezquitas construidas por los sultanes con mármoles y maderas de importación. Cúpulas cubiertas de oro, mosaicos, etc…

Mezquita del Sultán Omar Ali SaifuddinBandar Seri Begawan, Brunéi
Mezquita del Sultán Omar Ali Saifuddin
Mezquita Jame Asr Hassanil Bolkiah Mosque, Bandar Seri Begawan, Brunei
Detalle de escalinata

Política y sociedad

El Sultanato de Brunéi fue colonia inglesa con lo que, los ingleses dejaron algunas cosas bien ataditas. La compañía que explota los yacimientos petrolíferos del país es «Shell». Algo que me llamó la atención, es que los ingleses tienen destacamentos militares en el país, pero aún más, que el ejército local tiene una compañía de gaiteros a imagen de los escoceses. Me temo que debido a las pacatas costumbres de la región, estos están obligados a llevar calzoncillos por ley.

Ejercito bruneano
Practicando para desfilar

Escasamente poblado, es probable ver escenas como la de abajo. Monos campando a sus anchas sin nadie que les moleste en el centro de la capital.

Monos en Bandar Seri Begawan
Qué monada!

Por medio de la amiga de una amiga de otra amiga, en Brunéi tuve no solo la oportunidad de convivir con locales, sino que directamente nos acogieron en su casa a una compañera de viaje canadiense y a mí. El trato no pudo ser mejor. No solamente nos invitaron a quedarnos en sus respectivas casas, sino que incluso no nos dejaban pagar en ninguno de los lugares donde íbamos.

Restaurante en Bandar Seri Begawan
Opípara y variada comida

Hasta tuvimos sesión de tatuajes con henna gratuito. El diseño a escoger de un muestrario.

Como curiosidad, decir que la capital es desde sus orígenes un asentamiento sobre las aguas. Estas casas y edificios sobre pilares de madera disponen de todos los servicios que necesitan, desde escuelas y bibliotecas, hasta gasolineras para las lanchas.

La gente en Brunéi está encantada de ver turistas, ya que no son muchos los que deciden darse una vuelta por aquí. En la imagen de abajo parece que estamos jugando a «piedra, papel, tijera».

Diálogo en Bandar Seri Begawan
Piedra, papel, tijera

Los soldados son también muy amigables, aunque un poco «paraos».

Soldier, Bandar Seri Begawan, Brunei
Soldadito de pega

A pesar de ser un país pequeño, conviven varías etnias. Tuvimos la oportunidad de compartir un día con una de ellas, los ibán. Como curiosidad decir que estos últimos viven en casas comunitarias. Algo parecido a un gran barracón donde la entrada es un pasillo común. Tras las puertas es una casa normal y corriente con su patio en el exterior, su garaje bajo la casa, y cualquier otra facilidad que pueda tener una casa adosada.

Preparando la cena

Se podría decir que aquí se produce vino de arroz desde siempre, con lo que la venta y consumo de este producto está permitido. Pernoctamos en una casa ibán que por cierto, como está permitido viajar a la vecina Malasia -40 km. desde aquí- con un pasaporte especial y también introducir en el país hasta dos litros de licor por persona, estoy obligado a decir que por lo que pude ver, los ibán -que la mayoría no son musulmanes-  se ponen de ron y güisqui hasta las cartolas.

Comida iban, Brunéi
Gran variedad de alimentos

Lo cierto es que en el Sultanato de Brunéi no hay mucho que hacer aparte de ver la capital y la -parece ser- pasarela sobre los árboles más alta del mundo. Esto en el precioso Parque Natural Ulu Temburong, bosque primigenio típico de las Selvas de Borneo. El transporte público es casi inexistente, ya que en todas las casas hay varios coches. Su compra está subvencionada por el estado y son baratos. El precio de la gasolina, si no me falla la memoria, es el equivalente a 15 céntimos de euro por litro. El país es bastante aburrido. La actividad preferida de los bruneanos es ir a centros comerciales y restaurantes cuando su agenda se lo permite. Pero lo bueno que tiene, es que la gente es exageradamente hospitalaria y ves que disfrutan teniéndote hospedado en su casa. O sea que, si estás por la zona, con certeza te agradecerán que les hagas una visita.

Despedida en Ulu Temburong National Park, Brunéi
Nuestros guías en Ulu Temburong National Park

6 comentarios sobre “Sultanato de Brunéi

  1. Yacimientos petrolíferos y como no, la huella de las multinacionales. Se nota que hay pasta por las fotos de los edificios. Saliste con un tatto de henna. Lo mejor, la gente hospitalaria.

    1. Tengo muy buen recuerdo de Brunéi y eso sin duda lo hicieron posible las personas con las que allí estuve. Totalmente recomendable una visita si se está por la zona.

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